Cuando necesites salir de allí procura moverte zig-zagueante y con cuidado tratando de esquivar la tristeza y la burla que va quedando dispersa en tu honor... Como en aquellos días cuando eras inocente e incansable en tu afán de todo y el daño jamás pasaba cerca de ti y el miedo no era mas que la suma de todas las cosas que no conocías... Como cuando éramos iguales y la duda no existía y la confianza era lo mas natural que entre los dos había.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario